Nuevas perspectivas de mujeres periodistas para entender y atender realidades desafiantes.
Para analizar cómo los medios comunitarios promueven la inclusión y el diálogo intercultural, cómo enfrentar los desafíos de la auto-representación mediática, y cómo empoderar y amplificar las voces de migrantes y comunidades diversas en Filadelfia Madre Tierra reunió a Bettina Escauriza, Coordinadora de producción de noticias en PhillyCam; Luisa Suárez, Directora editorial de Equal Info Philly en Resolve Philly; Jesenia de Moya Correa, Directora en el Latino Media Initiative de The Center for Community Media; y Jos Duncan-Asé, Fundadora y Directora de Love Now Media en la charla “Los medios de comunicación comunitarios como plataforma para las voces de los inmigrantes“.
Descubre a continuación las ideas principales que Madre Tierra recopiló de ese diálogo destacando las contribuciones clave del periodismo comunitario a la calidad de vida de las comunidades inmigrantes y diversas de Filadelfia, todo ello visto desde la mirada de destacadas mujeres, profesionales, tanto migrantes como nativas, que han dinamizado nuevas conversaciones entre sus salas de redacción y sus audiencias, y que han hecho crecer este periodismo desde sus propias experiencias.
¡Las comunidades primero!
En un mundo digital y competitivo, los medios comunitarios se destacan por su asertividad y compromiso con manifestar la equidad y el acceso a la información. A diferencia de otros medios, su conexión genuina con las comunidades locales les permite entender mejor sus necesidades. Al apostarle a un periodismo centrado en la comunidad, ganan credibilidad y lealtad pues proporcionan información relevante. Un ejemplo de su eficacia es la oferta de contenido bilingüe, vital para las comunidades biculturales que representan.
Resiliencia e innovación en acción
El pensamiento crítico y el cuestionamiento de narrativas dominantes y dañinas han impulsado a los medios comunitarios a crear y promover nuevas narrativas. El valorar los relatos locales y visibilizar la diversidad de las comunidades, les ha dado mayor aceptación y posicionamiento. Su orientación a escuchar a las comunidades les permite ofrecer un periodismo participativo que no solo reporta, sino que también abre espacios a historias no contadas porque investiga para dar contexto y explicar la complejidad detrás de los hechos.
Por su parte, centrarse en soluciones en lugar de problemas y destacar a quienes lideran cambios en sus comunidades permite a estos medios ofrecer información relevante. Lo que empodera tanto a los involucrados, como a otros que enfrentan desafíos similares. Al mostrar viejas realidades desde nuevos ángulos visibilizan otros aspectos que rara vez son cubiertos.
Muchos medios comunitarios fomentan empatía con sus acciones al propiciar conversaciones profundas que han estado faltando, yendo mas allá del simple objetivo de informar. También han impulsado con ello oportunidades para que diversas personas se comuniquen, en lugar de solo consumir información aceleradamente.
Además, el estar abiertos a colaborar con diversos grupos cada vez más propicia nuevas y mejores oportunidades para que su impacto se amplifique.
Los medios centrados en comunidades migrantes especialmente han jugado un rol determinante en la preservación cultural. No solo porque recrean y celebran las memorias y los orígenes, sino también porque muestran cómo quienes migran se integran y contribuyen a sus comunidades de acogida; y cómo sus aportes, con el tiempo, no solo les son reconocidos, sino que les van demostrando su pertenencia a los nuevos territorios.
Las nuevas representaciones que circulan en las pantallas de plataformas comunitarias están siendo cada vez más vistas porque ayudan a desmantelar estereotipos dañinos al explicar y dotar de sentido las realidades con historias diferentes. Lo que está significando un gran avance en el camino hacia un cambio de percepciones basadas a menudo en el desconocimiento.
Superar barreras lingüísticas: más allá de la traducción
En un mundo lleno de traductores digitales, superar la barrera del idioma puede parecer simple. Sin embargo, solo aquellos que enfrentan esta barrera saben lo crucial que es a la hora de garantizar el acceso a derechos y bienestar.
Algunos medios comunitarios comprenden bien esta realidad. Por eso, su enfoque editorial va más allá de traducir sus contenidos. Para ‘no dejar a nadie atrás’, muchos medios implementan estrategias profundas que promueven el derecho a la información a través de:
- Priorizar intereses comunitarios: Enfocándose en información y servicios relevantes para la comunidad.
- Ofrecer recursos bilingües: Destacando fuentes de información, servicios y/o eventos que ofrezcan atención en más de un idioma.
- Desplegar información: Facilitando la comunicación bidireccional en temas de interés.
- Proveer contexto: Explicando el origen, análisis e impacto del hecho a compartir.
- Entregar instrucciones claras: Proporcionando guías sobre cómo acceder a la información en el idioma preferido de la comunidad.
Asimismo, la conversación entre Bettina Escauriza, Luisa Suárez, Jesenia de Moya y Jos Duncan-Asé incluyó una mirada en prospectiva de los desafíos que deberán superar los medios comunitarios si quieren fortalecerse y fortalecer así las voces de quienes le dan sentido a sus esfuerzos. Las invitadas identificaron algunos asuntos tales como:
- Superar la segmentación. Muchas audiencias evitan contenidos que creen irrelevantes, aunque podrían ser de su interés. Quienes producen contenidos trabajan exclusivamente en inglés o español limitando su alcance. Dicha separación, incluso dentro de la comunidad latina, dificulta la conexión y aleja a quienes aparentemente son diferentes. Además, la segmentación impide que los medios se escuchen y se integren entre sí.
- Más acceso a información pertinente en tanto recursos, servicios, oportunidades, y no solo a hechos (noticias y registro de eventos).
- Elevar la auto-representación en las salas de redacción para que su diversidad de cuenta de las múltiples culturas existentes en la ciudad.
Este último asunto de la auto-representación mediática no es menor. Las panelistas coinciden en que esta característica brinda una visión más atenta y sensible de las realidades, sus entornos, y la diversidad latente. Ser migrante, hija de migrantes o miembro de una comunidad diversa es una ventaja. Esta condición facilita el visibilizar asuntos que se desean posicionar mediáticamente. Quien reporta comunitariamente actúa como puente, ayudando a comprender realidades distantes y distintas, y a revelar historias no contadas.
Sin embargo, no es un impedimento el no pertenecer a la comunidad que se cubre. Las panelistas sostienen que los periodistas pueden representar genuinamente a una comunidad si se relacionan estrechamente con sus miembros y adoptan un enfoque centrado en ella. La clave es una comunicación participativa e inclusiva, haciéndose disponible a la retroalimentación durante todo el proceso periodístico, incluso después de la publicación. Este periodismo de bienestar fortalece y nutre las comunidades, creando «relaciones vitamina»; en lugar de solo extraer información y coleccionar fuentes.