¿Crees que las infecciones de transmisión sexual (ITS) no son comunes? ¿Piensas que nunca podría pasarte a ti? Entonces debes saber que no solo son infecciones frecuentes sino que, además, tanto las ITS como las ETS (enfermedades de transmisión sexual) tienen un profundo impacto en la salud sexual y reproductiva en todo el mundo. De hecho, según la OMS, cada día se adquieren más de 1 millón de ITS.
“No se trata de ser bueno, malo, limpio o sucio, se trata de normalidad y actividad sexual”. Se pueden reducir las posibilidades de contraer una ETS usando condones con sus parejas sexuales y realizándose chequeos regulares de salud sexual. “Es importante que los genitales no tengan ningún tipo de lesión”.
Esto lo afirman los doctores Liliana Marin, especialista en ginecología y obstetricia y el urólogo y especialista en Urodinamia Tomás Machado, con quienes charlamos y profundizamos en una entrevista, sobre las infecciones de transmisión sexual, afirmando que son tan comunes, que cualquiera que haya tenido relaciones sexuales puede contraer una.
¿Cómo se vive el diagnóstico?
Aún en el siglo XXI y con todos los avances y estudios, todavía asociamos las enfermedades de transmisión sexual con promiscuidad y eso impacta, se respira, se siente y se piensa diferente entre hombres y mujeres. Es innegable.
Entonces, ¿cómo se diagnostican las infecciones de transmisión sexual (ITS)? Lo primero que tienes que saber es que si estás sexualmente activa o activo, debes visitar a tu médico, quien te realizará un examen físico o pélvico para buscar signos de infección, como una erupción, verrugas o secreciones.
De hecho, algunas ETS se pueden diagnosticar durante un examen físico o mediante un examen microscópico de una llaga o líquido extraído de la vagina, el pene o el ano. Ten en cuenta que los análisis de sangre pueden diagnosticar otros tipos.
Preguntas Claves:
1.- ¿Qué causa las enfermedades y las infecciones de transmisión sexual?
Tanto las ETS y las ITS pueden ser causadas por bacterias, virus y parásitos .
2.- ¿Quién se ve afectado por las enfermedades de transmisión sexual (ETS)?
La mayoría de las ETS afectan tanto a hombres como a mujeres, pero en muchos casos los problemas de salud que causan pueden ser más graves para las mujeres. Si una ETS se transmite a un bebé, puede causar problemas de salud graves.
3.- ¿Cuáles son los síntomas de las enfermedades de transmisión sexual (ETS)?
Las ETS no siempre causan síntomas o en tal caso, pueden causar síntomas leves. Entonces es posible tener una infección y no saberlo. E incluso sin síntomas, las ETS aún pueden ser dañinas y pueden transmitirse durante las relaciones sexuales.
Si hay síntomas, podrían incluir:
– Secreción inusual del pene o la vagina.
– Llagas o verrugas en el área genital
– Micción dolorosa o frecuente (hacer pis)
– Picazón y enrojecimiento en el área genital
– Ampollas o llagas en o alrededor de la boca
– Olor vaginal anormal
– Picazón anal, dolor o sangrado
– Fiebre
4.- ¿Cuáles son los tratamientos para las enfermedades de transmisión sexual (ETS)?
Los antibióticos pueden tratar las ETS causadas por bacterias o parásitos. Es importante recordar que no existe cura para las ETS causadas por virus, pero los medicamentos a menudo pueden ayudar con los síntomas y reducir el riesgo de propagar la infección.
El uso correcto de condones de látex reduce en gran medida, pero no elimina por completo, el riesgo de contraer o propagar ETS. La forma más confiable de evitar la infección es no tener sexo anal, vaginal u oral.
Existen vacunas para prevenir el VPH (virus de papiloma humano) y la hepatitis B.
5.- ¿Se puede tener más de una ETS al mismo tiempo?
Sí, se puede tener más de una ETS al mismo tiempo porque la primera debilita el sistema inmunológico y el cuerpo se vuelve menos eficaz para combatir nuevas infecciones. Además, enfermedades como la gonorrea y la clamidia pueden ocurrir al mismo tiempo, por lo que, si se tiene una, lo ideal es hacerse una prueba para ver si hay otras.
6.- ¿Cuáles son las diferencias entre ITS Y ETS?
ETS: Se refieren específicamente a las condiciones clínicas o enfermedades causadas por las infecciones de transmisión sexual.
ITS: incluyen la clamidia, la gonorrea, la sífilis, el herpes genital y el virus del papiloma humano (VPH). Estas infecciones pueden transmitirse a través de relaciones sexuales vaginales, anales u orales, así como por contacto íntimo directo de piel a piel.
VIH y VPH no son lo mismo
Las personas pueden contraer el VPH (virus del papiloma humano) y el VIH (virus de la inmunodeficiencia humana) a través de la actividad sexual, por lo que los médicos consideran a ambos ITS. Los virus pueden permanecer latentes en el cuerpo durante años sin causar síntomas.
El VIH está presente en los líquidos corporales de las personas infectadas: sangre, semen, secreciones vaginales y rectales o la leche materna.
Por lo que puede transmitirse por una transfusión de sangre, por compartir jeringas u otro material quirúrgico, y por transmisión de la madre al hijo durante el embarazo, el parto o la lactancia.
En caso del VPH una persona puede contraer el virus incluso si solo ha mantenido relaciones con una persona. Este se transmite también por el contacto directo con la piel, aunque no tenga signos o síntomas.
De hecho, tal y como lo afirma el Dr Machado: “En EEUU se pone la vacuna del VPH de forma gratuita hasta los 45 años”. Esta vacuna se administra en el brazo izquierdo, mediante una inyección intramuscular y ha resultado eficaz y protege contra enfermedades como el cáncer uterino.
Preservativo, ¡siempre!
Antes de tener un encuentro sexual, lo ideal es tener una charla previa con tu compañero/a para tener sexo seguro.
El uso del preservativo es fundamental a la hora de prevenir las enfermedades de transmisión sexual: su uso debe ser constante y adecuado para, así, reducir los riesgos.
Quienes tienen relaciones sexuales con varias parejas aumentan los riesgos de contraer enfermedades de transmisión sexual. Aquella persona que vaya a comenzar una relación con alguien que no conoce, debería hacerse pruebas que detecten enfermedades y exigir lo mismo de la otra persona.
Según la Dra. Liliana, fumar, el consumo de alcohol o de otras sustancias que impliquen compartir jeringas, por ejemplo, puede incrementar conductas de riesgo.
El lado psicológico de las ETS
La psicóloga Beatriz Montenegro, en otro live afirma que tener un diagnóstico sobre una ETS no solo afecta el lado físico, si no el lado psicológicos y social.
En determinadas ocasiones esto puede conllevar problemas a la hora de mantener relaciones íntimas con otra persona, autolimitaciones a causa de estereotipos sociales, problemas de autoestima, autoimagen, asertividad y toma de decisiones.
Además, Montenegro explica que la manera de afrontarlo dependerá “de nuestra condición personal previa y los problemas que puedan asociarse a la misma”. De esta manera, estos no serán los mismos si se tiene o no pareja estable, si se ha tenido un encuentro esporádico voluntario o una situación forzada no deseada, o si se trata de una relación extramatrimonial.
Debido a la gran desesperación y culpa que puede llegar a sentir el paciente, será preciso contar con apoyo profesional para canalizar, con las terapias adecuadas, esos sentimientos.
El conocimiento es poder
Ya quedó clarísimo que todo el mundo puede contraer una ITS. Por eso, resulta de vital importancia que todas y todos las conozcamos y sepamos cómo prevenirlas y actuar en caso de infección.
Es importante hacer llegar información adaptada a la infancia desde una edad temprana, antes del inicio de su vida sexual.
El acceso a servicios de asesoramiento en relación con las ITS y a las ETS, como por ejemplo el VIH, también es indispensable. Cada vez con más frecuencia, los países dirigen las intervenciones centradas en las ITS a las y los trabajadores sexuales, los hombres que tienen relaciones homosexuales y los consumidores de drogas inyectables. Sin embargo, el acceso a pruebas de diagnóstico de calidad sigue siendo limitado en muchos países de ingresos bajos y medianos.
Así que como hemos visto, las creencias falsas sobre el VIH y las ITS son una realidad y un problema a la hora de luchar contra las enfermedades de transmisión sexual. Esperemos con este artículo haber aportado nuestro granito de arena en la desmitificación y la prevención de estas enfermedades. ¡Cuida de tu bienestar y protege tu salud sexual!